Estos dispositivos son realmente útiles para eliminar la suciedad que, con el paso del tiempo, va posándose en el fondo de la piscina. Además, también contribuyen al filtrado del agua, eliminando las partículas que no se pueden diluir mediante la cloración.
Sin embargo, aunque los limpiafondos simplifican las tareas de mantenimiento de una piscina en gran medida, también requieren de algunos cuidados. En caso de no hacer un correcto mantenimiento del limpiafondos, tanto su rendimiento habitual como su vida útil pueden verse afectados.
Por eso, lo más aconsejable es cuidar del limpiafondos llevando a cabo una serie de tareas de mantenimiento y de buenas prácticas en su uso. En Piscinas Ferromar llevamos más de 15 años trabajando en el sector de la piscina, por lo que sabemos de lo que estamos hablando. A continuación, te dejamos cinco aspectos clave para cuidar tu limpiafondos.
1.Cuidar el agua de la piscina
Si no sabes cómo cuidar tu limpiafondos, empezar por cuidar el medio en el que se mueve: el agua. Estos equipos de limpieza trabajan sumergidos en la piscina, por lo que pueden verse afectados si el agua no está en las condiciones adecuadas.
Antes de cada limpieza, debes controlar que el nivel de PH y cloro del agua sean correctos. Asimismo, hay que tener cuidado con la temperatura y no utilizar el limpiafondos si estas es inferior a 12ºC o superior a 32ºC.
Del mismo modo, será esencial utilizar un alguicida que evite la aparición de algas en las paredes. En caso de que estas proliferaran en la piscina, la tarea de limpieza del limpiafondos podría verse dificultada.
2. Sacar el limpiafondos del agua
Si quieres alargar la duración del limpiafondos, es importante que éste pase el menor tiempo posible dentro del agua. Por este motivo, una vez acabado el ciclo de limpieza, deberás sacar el limpiafondos de la piscina. Este paso es fundamental para que los productos químicos o la cloración salina utilizados para mantener el agua limpia puedan dañar alguno de sus componentes.
Una vez con el limpiafondos fuera, será el momento perfecto para sacar la bolsa del filtro y vaciarla. Así, el filtro quedará limpio y listo para la próxima limpieza. También es conveniente aprovechar este momento para hacer una limpieza general del limpiafondos y sus componentes.
3. Leer las instrucciones del fabricante
Aunque existen recomendaciones generalizadas para todos los limpiafondos, a la hora de cuidar y mantener uno de ellos es imprescindible conocer la marca y el modelo para seguir las especificaciones del fabricante.
Además, habrá que cumplir con las recomendaciones de mantenimiento y cuidado que se indiquen en el manual de instrucciones del aparato y tenerlas presentes antes de llevar a cabo cualquier procedimiento.
4. Revisiones periódicas
Detectar posibles averías a tiempo es clave para evitar problemas más graves con tu limpiafondos. Por eso, una de las mejores recomendaciones sobre cómo cuidar tu limpiafondos es revisar de forma periódica el estado de todas las piezas.
En caso de detectar que existe algún problema en las ruedas, cepillos, correas o cualquier otro componente del limpiafondos, lo mejor es ponerse en contacto con un Servicio Técnico de Limpiafondos que pueda poner solución con la mayor brevedad posible.
5. Guardar fuera de temporada
Una vez finalizada la temporada de baño, es importante guardar el limpiafondos en el cuarto de la depuradora o en cualquier otro lugar en el que no quede expuesto al sol ni a temperaturas extremas. Además, también es importante enrollar el cable de modo que no quede muy apretado y llevar cuidado de que los cepillos no queden aplastados.